El Sistema de Combate y Observación Avanzada, SCOA, está equipado con un gran número de capacidades que permiten operaciones de reconocimiento en los escenarios más complejos. Este sistema está preparado para funcionar tanto de día como de noche en condiciones climáticas adversas.
SCOA cuenta con el sistema electro-óptico OTEOS estabilizado en dos ejes con un campo de visión de 360 grados y un telémetro láser, y por un sistema de armas de control remoto GUARDIAN 2.0, que dota al vehículo una gran capacidad de defensa para corto y medio alcance.
Todos los sistemas están controlados por un BMS (Battle Management System), que facilita la toma de decisiones sobre un objetivo detectado por los sistemas de observación, así como la recepción de información de sistemas externos.


